Uno de los puntos de interés en el mundo de la ciberseguridad que nos ha dejado este año 2020 que ha estado tensionado por las consecuencias de la pandemia del COVID-19 y el aumento del teletrabajo es el Ransomware, que se ha posicionado como la mayor amenaza de ciberseguridad en 2020.
Amenazas en el Panorama 2020
Dentro del 2020 ocurrieron muchos sucesos que llevaron a los grupos de cibercriminales a adaptarse y modificar su forma de operar. A favor de ellos, el teletrabajo y la disminución de personal en algunos equipos formó el escenario perfecto para atacar a los más desprevenidos. Dentro de las amenazas latentes más informadas dentro del panorama de inteligencia durante el año 2020 podemos mencionar:
Ransomware con Exfiltración de data
El 27% de los incidentes de seguridad con malware durante el último año estuvieron relacionados con ransomware según informe de Verizon. Durante el año evidenciamos sofisticados ciberactores tales como:
- Sodinokibi
- Maze
- Egregor
- NetWalker
- Ryuk
- Conti
Phishing
Respecto de los principales causantes de brechas de datos, el phishing ocupa un 14% del total según datos de IBM. Es una de las tácticas más desarrolladas y eficaces para introducir malware y tomar el control de los sistemas atacados, robar información confidencial y robar dinero a las víctimas. Tal y como lo hemos abordado en anteriores boletines se hace cargo de explotar al eslabón más débil que es la concientización del usuario.
En los últimos meses de este 2020 podemos destacar amenazas informadas en nuestros boletines con títulos como:
- Advertencia sobre ciberataques y estafas relacionados con la vacuna COVID-19
- Nueva campaña de phishing protagonizada por Dridex
- Campaña de phishing Office 365 contiene tácticas innovadoras de evasión
- Nuevos ataques de Emotet utilizan señuelos falsos de Windows Update
- La evolución del phishing: bienvenido "Vishing"
Explotación de vulnerabilidades
La utilización sistemática de las vulnerabilidades más explotadas respecto a las amenazas latentes del panorama de ciberinteligencia está dada ya que, aún existen organizaciones que no cuentan con las actualizaciones pertinentes. Un ejemplo de esto es que a casi un año de que Microsoft finalizó oficialmente el soporte para su sistema operativo Windows 7, server 2008 y server 2008 R2 aún tenemos un importante número de usuarios que siguen ejecutando estos sistemas operativos sin soporte. Aunque algunos siguen pagando a Microsoft por el privilegio de recibir actualizaciones de seguridad como parte del programa Extended Security Update, los cuales enfrentarán aumento en el costo de esas actualizaciones el 2021.
Panorama
Los ataques de ransomware han sido tan rentables para los ciberdelincuentes que casi no existe la posibilidad de que esta amenaza desaparezca para el año 2021, especialmente con tácticas evolucionadas (robar datos y filtrarlos o venderlos en la web oscura) diseñadas para forzar el pago de un rescate. En el corto plazo los cyberactores seguían utilizando el Phishing, Smishing y Spearphishing como uno de sus principales vectores de ataque aprovechando la incertidumbre de la gente con respecto a temas contingentes como ha sido evidenciado todo este 2020.
El Centro de Ciberinteligencia de Entel CyberSecure recomienda lo siguiente:
- Generar una regla personalizada para bloqueos de IOC’s en perfiles entrantes perimetrales.
- Proteger el protocolo RDP:
- Deshabilite los servicios RDP, si no es necesario. La desactivación de servicios no utilizados e innecesarios ayuda a reducir su exposición a las vulnerabilidades de seguridad, y es una buena práctica de seguridad.
- Si no es posible cerrarlos, limite las direcciones de origen que pueden acceder a los puertos.
- Proteger el acceso a los sistemas RDP, bloqueando el sistema local en lugar del sistema remoto. Incluso si el primero no tiene valor, la sesión RDP solo estará protegida limitando el acceso al sistema cliente.
- Desconectar sesiones RDP en lugar de bloquearlas, esto invalida la sesión actual, lo que impide una reconexión automática de la sesión RDP sin credenciales.
- Bloquear bidireccionalmente el puerto TCP 3389 utilizando un firewall o hacerlo accesible sólo a través de una VPN privada.
- Habilitar la autenticación de nivel de red (NLA).
- Tener políticas de respaldo periódico que se almacenen fuera de la red organizacional.
- Escanear todos los archivos adjuntos, antes de abrirlos, con un antivirus que detecte comportamientos para combatir los ransomwares.
- Mantener una buena estrategia de respaldo de información: sistemas de copias de seguridad que deben estar aisladas de la red; y políticas de seguridad. Lo anterior permitirá neutralizar el ataque, restaurar las operaciones y evitar el pago del rescate.
- Actualizar los equipos con Windows a las últimas versiones.
- Nunca seguir la instrucción de deshabilitar las funciones de seguridad, si un correo electrónico o documento lo solicita.
- Establecer políticas de seguridad en el sistema para impedir la ejecución de ficheros desde directorios comúnmente utilizados por Ransomware (App Data, Local App Data, etc.)
- Disponer de sistemas antispam para correos electrónicos, de esta manera se reducen las posibilidades de infección a través de campañas masivas de malspam por correo electrónico.
- Mantener listas de control de acceso para las unidades mapeadas en red restringiendo los privilegios de escritura. Con esto podrá identificar el impacto generado por el cifrado de archivos, entendiendo que el secuestro de información se producirá en todas las unidades de red mapeadas en el equipo víctima.
- Seguir las normativas internacionales tales como ISO 27001:2013 en su control A.7.2.2 “Concienciación con educación y capacitación en seguridad de la información” o NIST PR.AT-1: “Todos los usuarios se encuentran entrenados e informados”, a fin de tener bases para divulgar campañas educativas orientadas a nivel de usuarios respecto al correcto uso de las herramientas tecnológicas, haciendo énfasis en cómo proceder al recibir correos de orígenes desconocidos, objeto prevenir que sus usuarios sean víctimas de entes maliciosos.